Rómulo Pardo Silva
Las élites millonarias globales necesitan dominar el mundo
para asegurarse una situación mejor después del colapso civilizatorio. Su sistema
económico no tiene solución.
El crédito basura de los banqueros tiene una causa más honda
que el placer de lucrar jugando al casino, es la busca de un paso en medio del atasco.
Los poderes locales en los países en desarrollo están industrializándose
y no hay compradores para un volumen nuevo y mayor de productos. Los productos
de EEUU, la Unión Europea, el BRICS, Japón, Corea del Sur, se estorban. Un
informe chino pronostica que se intensificarán las fricciones con otros países
en asuntos de economía, comercio e inversión.
Si los capitalistas elevan los sueldos en sus países sus precios
no serán competitivos. Según el ministerio de comercio chino “El rápido aumento
de los costos de mano de obra está impactando en los planes de negocios”.
Con sueldos bajos no hay demanda interna, con altos no hay
comercio internacional.
Además la naturaleza es finita y escasean o no existen
recursos para todos. Si ahora hacen guerras por petróleo y gas, también el plan
militar considera otras por agua, tierras raras, coltan, pesca, campos de
cultivo, climas habitables…
Estados Unidos y los socios de la OTAN no derrochan dinero en
armas, invierten en medios de expansión.
Tras Siria hay muchos, Irán, Líbano, Venezuela, India,
Brasil, Cuba, China, Rusia. Todo el orbe debe ser conquistado y la estrategia
no es reciente.
Rusia y China permitieron avanzar el neocolonialismo en
Libia. Ahora en Siria parecen ver mejor su propio riesgo.
Los gobernantes del planeta quieren resolver el nudo por la
fuerza, saben que la época es insostenible y se preparan para el orden que
sigue.
Mitt Romney y el senador McCain han sido muy francos.
El mundo es un lugar peligroso y necesita un ejército de
EE.UU. para mantenerlo bajo control, afirmó el candidato presidencial. Si es
elegido, se comprometió a mantener una fuerza militar "sin ningún poder que
se le compare en cualquier lugar del mundo". Advirtió sobre los peligros
de una reducción militar citando las crecientes amenazas de Irán, Pakistán,
China y Rusia. Agregó que América debería mantener su dominio como la más
fuerte militarmente en el mundo y así no solo ganar guerras sino también
prevenirlas. El senador John McCain luego del discurso lo alabó diciendo: “está
completamente calificado para ser comandante en jefe”. “Él cree en el
excepcionalismo estadounidense”. “Él cree que el siglo 21 será también un siglo
norteamericano” (Russia Today).
Obama persigue lo mismo pero es más torcido de lenguaje.
Ellos quieren el futuro según sus intereses particulares. El
socialismo debe enfrentarlos proponiendo un mañana ecológico solidario al
servicio de la humanidad y la vida completas.
Los Bilderberg ven más lejos que algunos socialistas.
Contacto romulo.pardo@gmail.com